Las chufas son tubérculos redondeados con superficie rugosa y con anillos transversales. Sus componentes principales son los carbohidratos, seguidos por las grasas, la fibra y las proteínas. Se destaca su riqueza en grasas que en su mayoría son monoinsaturadas.

La chufa tiene propiedades digestivas, ya que ayuda en casos de gastritis, dolor de estómago y acidez por ser un alimento de fácil asimilación. Además, tiene un alto contenido en Omega 9 que ayuda en la salud cardiovascular.